En este artículo ofrecemos una serie de refranes y expresiones coloquiales que hemos recopilado, algunos en Valladolid, y otros proceden de los refraneros citados en la bibliografía. AGUA Cada uno lleva el agua a su molino: Dirigir un asunto de modo que favorezca al interesado solamente. El aumentar no es por mucho madrugar, sino por saber ahorrar. Quien tuvo y ahorró, para la vejez guardó. Quien bien guardó, de nada careció. ALDEA La vida de la aldea désela Dios a quien la desea: Indica que la soledad y la falta de comodidades que hay en los pueblos, hacen que no sean apetecibles a todos.
Únicamente el pie de mi te alabo, salvo que es de mala factura, salvo que es muy ancho, y salvo que es largo y excepto que suda. A lo mejor sumando estas exageraciones a las de los otros retratos, saldría el verdadero faz de Pedro Calderón. Pero hacía tiempo que la hidalguía era pura cosa de relumbrón. Eso sí, mi Yahvé, Diego Calderón de la Barca, podía presumir de descender de una vieja casa montañesa. Con motivo de las engorrosas pruebas y papelorios que hube de preparar para conseguir ser Cabalgador de la Orden de Santiago no fue difícil demostrar que desde el siglo XV los Calderones abundaban en pueblos de Cantabria: desde Torrelavega y Cabuérniga a San Vicente de la Barquera. Mi señora abuela, su lecho, doña Inés de Riaño y Peralta sí que tenía posibles económicos y de ella proviene el capitalito con el que se dotó una capellanía que me estuvo destinada Pero de esta ascendencia materna provino el acomodación dinerario de la familia. Por mi madre le habría de corresponder en herencia a los Calderones unos
Preparación cristiana para la muerte Siempre ha sido costumbre y un deseo ferviente, tanto por parte de quien muere como de sus deudos, que la asesinato acontezca en la propia apartamento, y así poder «rematar a los seres queridos». Era un tono de orgullo familiar eficacia acompañar a sus mayores aun el mismo momento que les llegaba la muerte, y esto lo consideraban un deber de justicia y filiación, de semejante manera que, si alguien moría fuera, era mal visto alce la sociedad. El sacerdote se desplazaba hasta la casa del agonizante y lo confesaba. Muchas veces ya estaba falto de capacidad para hacer esta actuación y entonces el sacerdote le daba la absolución, después de incitarlo a contrición. En la parroquia existía un campanillo que señalaba a toda la vecindario que se iba a administrar su divina Majestad y, acompañados de los cofrades del Santísimo Sacramento, con faroles encendidos, se formaba una procesión, que la encabezaba un monaguillo tocando una campanilla.
Meterse en la boca del lobo. Avistar por encima del hombro. Morder el polvo. Mucho ruido y pocas nueces.
El silencio. Madrid: Alianza Editorial, Hora sería de que su obra fuera desempolvada y sacada de nuevo a luz en esta universidad gaditana. Silencio y lingüística. La tarea que se me ha encomendado con miras a levante seminario es la de abordar el problema del silencio como signo, lo que equivale a considerarlo como poco dotado de sentido y, por baza, portador de esa estructura de significante y significado que va asociada al nombre de Saussure. El gaditano Benot, en su obra póstuma deescribía: «Para que una cosa sea signo, baste una sola inteligencia que perciba relación entre lo significante y lo significado. Mas para que algo sea signo de lenguaje, se necesitan dos inteligencias: una que expresamente haga aparecer la cosa significante con intención de dar a conocer una relación entre ella y la cosa significada, y otra inteligencia perceptora de esa relacion. El fenómeno lingüístico es un caso especialidad de lo semiótico. El problema del silencio ha sido suscitado, en ocasiones, por el estudio del lenguaje.
Para quien quiera hacerse una idea exacta de las relaciones entre la Basílica cristiana y el pueblo judío, le es indispensable el estudio de dichas relaciones. Su comprensión ha variado con el tiempo. Afirmación de una relación recíproca Al llamarlas Antiguo Testamentola Basílica cristiana no ha querido en guisa alguno sugerir que las Escrituras del pueblo judío hubieran caducado y actualidad se pudiera prescindir de ellas. Su primera relación es precisamente ésta. Cuando, a principios del siglo II, Marción quiso rechazar el Antiguo Testamento, chocó con una completa oposición por parte de la Iglesia post-apostólica. Lc 24, Sugieren la idea de un bilateral nivel de lectura: un sentido aborigen, perceptible en un primer momento, y una interpretación ulterior, revelada a la luz de Cristo.