Y se le acercó para hacerle fiestas y gestos agradables. Pero el niño, espantado, forcejeaba al acariciarlo la pobre mujer decrépita, llenando la casa con sus aullidos. Una vela chica, temblorosa en el horizonte, imitadora, en su pequeñez y aislamiento, de mi existencia irremediable, melodía monótona de la marejada, todo eso que piensa por mí, o yo por ello -ya que en la grandeza de la divagación el yo presto se pierde-; piensa, digo, pero musical y pintorescamente, sin argucias, sin silogismos, sin deducciones. Tales pensamientos, no obstante, ya salgan de mí, ya surjan de las cosas, presto cobran demasiada intensidad. La energía en el placer crea malestar y sufrimiento positivo. Y ahora la profundidad del cielo me consterna; me exaspera su limpidez. El estudio de la belleza es un duelo en que el artista da gritos de terror antes de caer vencido. El asno, sin ver al gracioso, siguió corriendo con celo hacia donde le llamaba el deber. Toma en ella el alma un baño de pereza aromado de pesar y de deseo.
En voz alta, y con tan solo 21 años, busca transmitir en sus temas libertad y girl power. Conocé a la artista del momento. Época una sensación casi hipnótica, magia pura. María Becerra empezó a los 10 años haciendo castings para novelas producidas por Cris Morena , también se animó a pruebas como modelo para publicidades de crema o de papel tissue. Youtube fue el espacio en donde encontró su mejor versión. Aun que en lanzó su primera aire y por primera vez sintió que iba a ser una cantante laboral. Y ahora veo mis seguidores, las reproducciones y los conciertos y siento que es un montón.